Care Santos es una novelista que se divierte escribiendo, disfruta con la literatura. Para ella, escribir es un placer estético inmediato; significa la conquista tan ansiada de un pequeño espacio propio.
Care nos explicó:
" A menudo me he preguntado porqué escribo. Al principio, quizás escribí por imitación. Mi madre escribía un diario. Tenía un escritorio de aquellos que se cierran con cerrojo y llave en donde guardaba un cuaderno precioso y una pluma antigua , que sólo utilizaba para escribir en aquellas páginas. Lo hacía de noche, cuando todos nos metíamos en la cama, y nunca nos lo dejaba leer. Escribir era tener secretos. Más tarde me pareció que escribía para no aburrirme. Fui una niña tímida, sin muchos amigos, que nació en una casa llena de personas mayores. Escribir era una manera de huir de aquel mundo, de inventarme un mundo a mi medida".
Posteriormente serán otros los estímulos que la llevarán a escribir sus novelas. Tal como ella nos explica respecto a La ruta del huracán:
"En año 1994 fui a El Salvador, Costa Rica y Nicaragua. Fueron
casi 60 días llenos de experiencias. Me vienen a la memoria las
imágenes del volcán Irazú, un volcán próximo a San José de Costa
Rica, que visitamos. Al día siguiente, al levantarnos, una
noticia que ocupaba todas las portadas de los diarios, nos
sorprendió: "Ruge el coloso". El Irazú había entrado en erupción
aquella misma madrugada.Cuando me enteré de los efectos
devastadores del Mitch en Centroamérica, pensé, sobretodo, en
los amigos que estaban allí. Si no hubiera temido por mis amigos hispanoamericanos, nunca hubiera escrito esta novela".