El misterio de la cripta embrujada
Eduardo Mendoza
- Lo primero que te habrá llamado la atención es el título. "Misterio", "cripta", "embrujada"..., tres términos cargados de sugerencias. ¿Estás a punto de iniciar la lectura de un libro de terror? Quizá hayas pensado algo así. Misterio no va a faltar..., pero no creo que te dé mucho miedo, y sí bastante risa.
- Observa la ilustración ¿Te proporciona alguna pista de lo que esconde este relato? ¿Qué sugiere?
- Una típica novela de terror "de las de antes" o algo relacionado con esos "túneles del terror" con que se divierten algunos pasándolo fatal.
- Una "novela negra", policiaca, al estilo americano, con el aire de esas viejas películas en blanco y
negro.
- Simplemente, un individuo que, a juzgar por el título, se ha introducido sin autorización en algún lugar y anda por ahí, husmeando.
Puede que haya muy poco de lo primero, bastante de lo segundo y mucho de lo tercero...
- En esta música se puede captar una curiosa mezcla 'tragicómica', como en el libro.
- Como sucede en muchas obras de Mendoza, el escenario principal de la acción es Barcelona, una ciudad que describe con ironía, claro está, pero también con gran cariño. Se pueden encontrar referencias a calles, plazas, estaciones de tren...
- Vale la pena que te fijes en algunos nombres propios que aparecen; suelen ser un tanto cómicos.
- No tardarás en darte cuenta de que nuestro protagonista es un loco bastante lúcido...
¿No te recuerda eso a otros personajes parecidos?
En efecto, está clara la influencia de tres personajes muy famosos: Lázaro de Tormes y el Buscón, los grandes pícaros, y el famoso don Quijote. Compáralos con el detective que ha de resolver este enigma.
- Una "novela negra", policiaca, al estilo americano, con el aire de esas viejas películas en blanco y negro.